Toma las riendas de tu destino
“La libertad absoluta es el derecho y el poder de decidir cómo cualquier persona o cosa externa nos afecta.” — Stephen Covey
En un mundo lleno de cambios constantes y circunstancias que a veces parecen fuera de nuestro alcance, la verdadera libertad reside en el poder de decidir cómo reaccionamos ante cada situación. Stephen Covey nos invita a reflexionar sobre un concepto fundamental: la libertad no es simplemente la ausencia de restricciones, sino la capacidad de liberarnos del miedo y la ansiedad que nos genera lo que no podemos controlar.
¿Qué significa realmente tener libertad?
Muchas veces pensamos que la libertad consiste en hacer lo que queremos sin límites, pero en realidad, la libertad más auténtica nace de la autonomía emocional y espiritual. Es esa habilidad de conectarte contigo misma, entender tus emociones y, sobre todo, darte permiso de vivir alineada a tus valores y aspiraciones. Cuando aceptamos que no necesitamos la aprobación ni el entendimiento externo, comenzamos a construir un camino más genuino y lleno de sentido.
El ejercicio que puede transformar tu vida
Quiero proponerte un ejercicio que quizás, al igual que a mí, te ayude a tomar las riendas de tu destino. En un taller que tomé con Liz Gilbert, autora de Comer, rezar y amar, aprendí a crear un “justificante” personal, un documento que emite la autoridad máxima: el director de la escuela de la vida, en tu nombre. Con este justificante, te das permiso de vivir la vida que realmente deseas, sin arrepentimientos.
De la oficina del director de la escuela de la vida.
A quien corresponda:
(Tu nombre) tiene mi autorización para:
- Ser escritora (en mi caso)
- Vivir con autenticidad y sin miedos que me limiten (o cualquier otra cosa que realmente desees pero que no te has dado permiso hasta ahora)
Este permiso no es negociable y la presente se emite para lo que se requiera.
Atentamente,
El director de la escuela de la vida
¿No es hermoso pensar que, al emitirte este justificante, reconectas con la autoridad máxima que tienes: tú misma? La libertad más grande que posees es la decisión de cómo reaccionar ante las circunstancias que te rodean. La ansiedad y el miedo son sólo pasajeras si eliges no dejar que controlen cada aspecto de tu existencia.
Conéctate contigo misma y da el siguiente paso
En Furia Plena, la protagonista Mónica aprende que su fuerza no está en cambiar todo a su alrededor, sino en dominar la manera en que ella misma se relaciona con sus desafíos internos. Su historia nos muestra que la verdadera libertad se alcanza cuando logramos gestionar nuestras emociones, conectándonos en profundidad con nuestro ser y permitiéndonos liberarnos del control externo.
Te invito a tomar un momento para reflexionar: ¿qué miedos actuales o pasados te están impidiendo vivir plenamente? ¿Cómo puedes darte permiso para avanzar sin que el temor te limite? La respuesta está en esa decisión consciente y en aceptar que tú tienes el poder de decidir qué emociones permites que te dominen.
Elige tu camino y vive una vida en alineación con tus valores
Vivir con libertad implica también vivir en coherencia con tus valores y aspiraciones. Cuando te permites asumir el control sobre tus reacciones y decisiones, estás en camino de construir relaciones significativas y crecer de manera auténtica. No necesitas depender de la aprobación de los demás —sólo de la tuya propia— para sentirte plena y en paz.
Recuerda: la libertad más grande que tienes es decidir cómo responder a cada momento y desafío. Toma las riendas de tu destino, crea tu justificante personal y, sobre todo, confía en tu propio poder. La vida que deseas está a un solo paso de distancia: el momento de darlo, hoy mismo.
¡Inténtalo! Tú también puedes vivir en libertad absoluta, conectada con tu verdadero yo y en total control de tu plenitud.
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